MASAJES CALIENTES Y RELAJANTES EN PAREJA – Se terminó el aparecer con la caja de bombones o el típico ramo de flores. Con eso ya no se folla como antes. Ahora hay que saber hacer cosas como un buen masaje. La próxima vez sorprende a tu media naranja con uno de ellos, y quedarás como el tío más sensual. ¡Ojo, que esto también vale al revés, o sea, para ellas!
Yo aconsejo los masajes eróticos, bien dándoselos a la pareja, o contratando a alguien para que lo haga…
Si optáis por lo segundo, un consejillo, pero solo si sois de Barcelona o alrededores: Ines Tantra. Ubicados en una zona privilegiada, en pleno corazón de la ciudad de Barcelona. Muy cerca de Plaza de España. En este caso, Ines Tantra está cerca del Paseo San Juan. Ciento cuarenta m2 destinados a cuidar el cuerpo, para la libertad y el placer. Haimas, spa, duchas con agua de color, incienso…
También en masajes tántricos Barcelona dan cursos de Tantra y más cosas. Actividades todas ellas dirigidas por una sexóloga especialista en Artes Eróticos Orientales. La inspiración, en la filosofía Ines Tantra, una cultura del placer.
Afirman los científicos que el masaje erótico alienta las terminaciones de la zonas erógenas generando placer. Al parecer, estos masajes acrecientan las hormonas responsables de la excitación. Mejoran la vida sexual. En esto coinciden la mayor parte de los especialistas. Se trata de un ejercicio sensual que puede llevar a un buen clímax. Las caricias y los juegos son esenciales en una relación sexual.
Está comprobado que con los masajes se pueden combatir inconvenientes tales como la eyaculación precoz, y la pérdida del deseo, así como también la anorgasmia.
El masaje erótico perfecto puede ser ese de recorridos lentos que se tornan intensos por todo el cuerpo. De toques que generan placer, de despertar el erotismo. Sin tener por que acabar en un contacto genital. Sus múltiples beneficios son la incitación a la creatividad, fortalecer la confianza entre la pareja, la complicidad, y el aumento del deseo.
El masaje erótico favorece el clímax y rompe con la monotonía. Lo esencial es que el masaje cambie, que no siempre sean las mismas caricias. Hay mil técnicas para un masaje erótico. Casi podríamos decir que no hay límite. El erotismo es más que un impulso sexual, es un principio para recrearnos, y recargarnos de fuerza vital. Son importantes la respiración, la lentitud, la sutileza, los sonidos, las palabras…
La piel cuenta con diferentes capas. El vestido es una más de ellas. El desnudarse y el ambiente son parte del masaje, del juego creativo y erótico. Quien recibe el masaje puede ir guiando a su pareja. No incluyamos los genitales de entrada. Concentrémonos en producir y percibir placer. Desconectémonos del móvil y del trabajo, y hasta de la televisión. Como mucho, dejemos puesto el spotify con música de yoga. Disfrutemos de las sensaciones, percibamos nuestras respiraciones.
Usemos la punta de los dedos para acariciar suavemente a nuestra pareja, de forma inapreciable, tal y como si no la estuviésemos tocando. Empleemos la palma de la mano para rozar la piel de forma tierna a más intensa. Añadamos dulces, frutas, agua, vino, hielo…
Acaricie con las manos y tengamos presente que hay otros estímulos aparte de tocar con las manos: besar, soplar sobre la piel… Usemos aceites fluidos y grasos para que las manos se deslicen bien. De diferentes colores y olores. Con pinturas para el cuerpo podemos ir pintando números en su cuerpo.
Las articulaciones tienen una riqueza sensitiva alta. Podemos aprender a estimularlas para el desarrollo erótico de la pareja. Estimulemos zonas como la yema de los dedos, los labios, las orejas, y las zonas erógenas. Deslicemos las dos manos por los costados de la columna vertebral. Cambiemos el ritmo de la presión conforme a sus reacciones. La respiración de nuestra pareja es el mejor indicador.
MASAJES CALIENTES Y RELAJANTES EN PAREJA – Masajes eróticos en la cabeza
Lo primero es que tu pareja se tumbe de espaldas, y con la cabeza apoyada sobre un cojín. Te colocas de rodillas detrás y empiezas por la frente, con un suave recorrido con los dedos desde la nariz hasta el nacimiento del pelo. Alternando mano derecha y también izquierda. Doce veces. Cambiando la intensidad de la presión. Acabaremos con las palmas de las manos sobre sus sienes durante dos minutos.
Una de las cosas que debemos tomar en consideración es que la oreja es una zona ultra sensible y enormemente erógena. Una vez estimulada, manda un impulso eléctrico de forma directa a la tripa. Aprovecharemos para hacerle cosquillas con la lengua.
